Por: Daniela Michelle Mercado Flores – Becaria de investigación CERES
Bolivia, en el año 2024, experimentó un incremento significativo en los precios de los productos que son parte de la canasta familiar, afectando de este modo directamente el poder adquisitivo de las familias boliviana, particularmente en las principales ciudades del país. Con la siguiente investigación, se busca poder analizar y comprender como la inflación, particularmente en los alimentos y bebidas no alcohólicas, ha impactado en los ingresos de las familias bolivianas, específicamente en los ejes metropolitanos de La Paz, Santa Cruz y Cochabamba.
El desajuste entre ingresos y precios
La inflación acumulada en Bolivia durante el periodo de 2024 logró alcanzar el 9,97%, representando la más alta en los últimos 16 años. Especialmente, la división de alimentos y bebidas no alcohólicas registró un incremento de más del 15,40%, afectando productos esenciales como lo es la carne de pollo, carne de res, arroz y aceite comestible.
Esta subida de precios se puede atribuir a diversos factores, tales como: fenómenos del cambio climático que afectan a la producción de ciertos alimentos agrícolas, inflación importada debido a la devaluación de monedas en los países limítrofes y el contrabando a la inversa, en la cual producto de bolivianos son venidos ilegalmente en los países vecinos, reduciendo la oferta interna de estos productos en el país.
Distribución de ingresos familiares en las principales ciudades
Gráfico 1: Distribución de hogares según quintiles de ingreso familiar en Santa Cruz, La Paz/El Alto y Cochabamba/Kanata en 2024:
Se puede observar que más del 50% de las familias en La Paz/El Alto y Cochabamba/Kanata se ubican en los tres primeros quintiles, es decir, tienen ingresos por debajo de los Bs. 2600 al mes. Por otro lado, Santa Cruz presenta una distribución más equilibrada, pero aún conserva un núcleo muy importante en los estratos más bajos.
Impacto de la inflación en la canasta familiar
La inflación en alimentos y bebidas no alcohólicas del 15,40% en 2024 superó ampliamente el crecimiento de los ingresos familiares, que se mantuvieron estancados en la mayoría de los quintiles. Esto redujo significativamente el poder adquisitivo de las familias, especialmente aquellas en los quintiles más bajos, quienes destinan una mayor proporción de sus ingresos a la compra de alimentos.
Tabla 1: Incremento de precios en productos esenciales de la canasta familiar durante 2024:
Producto | Variación de precio (%) |
Carne de pollo | +15.4% |
Carne de res sin hueso | +15.4% |
Arroz | +15.4% |
Aceite comestible | +15.4% |
Fuente: Instituto Nacional de Estadística (INE)
El aumento de los precios de los productos básicos obliga a los hogares a cambiar su comportamiento de consumo para priorizar algunos productos de mayor necesidad o reducir el volumen de las compras, lo que puede tener consecuencias negativas para el bienestar y la salud de las familias bolivianas.
Se puede concluir que el aumento del precio de los alimentos básicos en 2024, superó significativamente el crecimiento de los ingresos familiares en las ciudades metropolitanas más grandes de Bolivia. Este desequilibrio afectó especialmente a las familias de bajos ingresos, quienes destinaron una mayor proporción de sus recursos a la alimentación. Esta situación pone de relieve la necesidad de políticas públicas que aborden tanto el control de la inflación como el fortalecimiento de los ingresos familiares para garantizar el bienestar económico de la población.