Con solamente 47 conflictos registrados en el mes de agosto 2013, puede afirmarse que la conflictividad social mantiene su tendencia a la disminución luego de haber alcanzado el elevado registro de 72 en el mes de marzo.

La información ha sido obtenida por el Observatorio de Conflictos de CERES, que funciona en coordinación con el centro Ciudadanía y con el apoyo de COSUDE, la Cooperación Suiza para el desarrollo, a partir de los informes de la prensa nacional.

Una rápida observación a los datos correspondientes a los últimos 12 meses, sin embargo, nos muestra que los conflictos parecen tener un carácter cíclico, y que luego de alcanzar una cúspide, pierden impulso por varios meses para reactivarse nuevamente.

A pesar de este importante descenso, el promedio a doce meses es de 56 conflictos por mes, lo que mantiene al gobierno del Presidente Morales como el de mayor conflictividad en los últimos 44 años, que es el periodo para el cual se cuenta con información continua y comparable. Es difícil suponer que esto vaya a cambiar porque las causas principales de la elevada conflictividad se mantienen: la elevada concentración de rentas en los organismos estatales, la debilidad institucional y la existencia de elevadas expectativas en la población que no han sido aún satisfechas.